El hombre, ser
religioso
El Cristianismo ha vivido desde sus orígenes en un mundo
religioso plural. Los cristianos han percibido este hecho de modo diferente según
épocas de la historia, y han respondido a través de las actitudes y
comportamientos más variados, dentro siempre de la preocupación de anunciar el
Evangelio en todos los rincones del orbe.
Los cristianos del mundo moderno se ven particularmente
urgidos a tener en cuenta la existencia de otras religiones además de la
propia. La globalidad planetaria de las comunicaciones, los extensos viajes, las
migraciones, las relaciones originadas en la época de las colonias, y el
comercio internacional, se encuentran entre los factores que han intensificado
los contactos entre las religiones, con las actitudes y resultados de colaboración
y de enfrentamiento que cabía esperar.
La
dimensión religiosa caracteriza al ser humano desde sus orígenes.
Purificados de la superstición, debida en definitiva a la ignorancia y
el pecado, las expresiones de la religiosidad humana manifiestan la
convicción de que existe un Dios creador, del cual dependen el mundo y
nuestra existencia personal. Si es verdad que el politeísmo ha
acompañado muchas fases de la historia humana, también es verdad que la
dimensión más profunda de la religiosidad humana y de la sabiduría
filosófica han buscado la justificación radical del mundo y de la vida
humana en un único Dios, fundamento de la realidad y cumplimiento de
nuestra aspiración a la felicidad (cfr. Catecismo, 28)
A
pesar de su diversidad, las expresiones artísticas, filosóficas,
literarias, etc. presentes en la cultura de los pueblos, a todas les
acomuna la reflexión sobre Dios y sobre los temas centrales de la
existencia humana: la vida y la muerte, el bien y el mal, el destino
último y el sentido de todas las cosas.
Como estas manifestaciones del espíritu humano testimonian a lo largo
de la historia, se puede decir que la referencia a Dios pertenece a la
cultura humana y constituye una dimensión esencial de la sociedad y de
los hombres. La libertad religiosa representa, por tanto, el primero de
los derechos, y la búsqueda de Dios, el primero de los deberes: todos
los hombres «por su misma naturaleza y por obligación moral están
obligados a adherirse a la verdad, una vez conocida.
La negación de Dios y el intento de excluirlo de la cultura y de la
vida social y civil son fenómenos relativamente recientes, limitados a
algunas áreas del mundo occidental. El hecho de que los grandes
interrogantes religiosos y existenciales permanezcan invariables en el
tiempo desmiente
la idea de que la religión esté circunscrita a una fase “infantil” de
la historia humana, destinada a desaparecer con el progreso del
conocimiento.
El cristianismo asume cuanto hay de bueno en la investigación y en la adoración de Dios manifestadas históricamente por la religiosidad humana, desvelando, sin embargo, su verdadero significado, el de un camino hacia el único y verdadero Dios que se ha revelado en la historia de la salvación entregada al pueblo de Israel y que ha venido a nuestro encuentro haciéndose hombre en Jesucristo, Verbo Encarnado.
No cabe duda que una de las características fundamentales de la cultura contemporánea es su carácter laico. Hoy la dimensión religiosa, católica como tal, casi ha desaparecido en las manifestaciones macro sociales. Tanto los aspectos religiosos como los morales son relegados al ámbito particular y exclusivo frecuentemente de cualquier discurso político, económico o social.
La Iglesia ha sido una de las instituciones religiosas que más ha insistido en la importancia como requisitos fundamentales para la convivencia con quienes piensan distinto. Los creyentes, en esta nueva configuración ideologico-politica que presenta multiplicidad de alternativas, debemos asumir los retos que para la difusión del mensaje evangélico se nos presentan. La opción cristiana, aunque ya no es dominante, no pierde por ello su legitimidad y actualidad; de ahí que sea fundamental e impostergable tomar en cuenta aquella advertencia que en el primer siglo de nuestra era hacia san Pedro: “Estén pronto a dar razón de nuestra Fe”. La conciencia cristiana exige que nuestra participación en la vida pública y social como miembros de la comunidad humana sea en todo momento una manifestación viva de aquello que creemos y profesamos. Dar razón de nuestra fe implicara entonces asumirnos cómo cristianos en todo momento, en cualquier espacio y en cualquier acción; significara también, proceder a cada instante con base en los criterios de un creyente. Ciertamente ello supone asumir los mínimos criterios que la convivencia civil nos impone, pero no limitarnos a ellos, sino superarlos y manifestarlos más plenamente a partir de nuestra concepción cristiana del mundo, del hombre y de la vida. En pocas palabras, ser testigos de Cristo y del Evangelio.
ACCIÓN INDIVIDUAL..... ( TRABAJO ESCRITO INDIVIDUAL )
El cristianismo asume cuanto hay de bueno en la investigación y en la adoración de Dios manifestadas históricamente por la religiosidad humana, desvelando, sin embargo, su verdadero significado, el de un camino hacia el único y verdadero Dios que se ha revelado en la historia de la salvación entregada al pueblo de Israel y que ha venido a nuestro encuentro haciéndose hombre en Jesucristo, Verbo Encarnado.
No cabe duda que una de las características fundamentales de la cultura contemporánea es su carácter laico. Hoy la dimensión religiosa, católica como tal, casi ha desaparecido en las manifestaciones macro sociales. Tanto los aspectos religiosos como los morales son relegados al ámbito particular y exclusivo frecuentemente de cualquier discurso político, económico o social.
La Iglesia ha sido una de las instituciones religiosas que más ha insistido en la importancia como requisitos fundamentales para la convivencia con quienes piensan distinto. Los creyentes, en esta nueva configuración ideologico-politica que presenta multiplicidad de alternativas, debemos asumir los retos que para la difusión del mensaje evangélico se nos presentan. La opción cristiana, aunque ya no es dominante, no pierde por ello su legitimidad y actualidad; de ahí que sea fundamental e impostergable tomar en cuenta aquella advertencia que en el primer siglo de nuestra era hacia san Pedro: “Estén pronto a dar razón de nuestra Fe”. La conciencia cristiana exige que nuestra participación en la vida pública y social como miembros de la comunidad humana sea en todo momento una manifestación viva de aquello que creemos y profesamos. Dar razón de nuestra fe implicara entonces asumirnos cómo cristianos en todo momento, en cualquier espacio y en cualquier acción; significara también, proceder a cada instante con base en los criterios de un creyente. Ciertamente ello supone asumir los mínimos criterios que la convivencia civil nos impone, pero no limitarnos a ellos, sino superarlos y manifestarlos más plenamente a partir de nuestra concepción cristiana del mundo, del hombre y de la vida. En pocas palabras, ser testigos de Cristo y del Evangelio.
ACCIÓN INDIVIDUAL..... ( TRABAJO ESCRITO INDIVIDUAL )
- De acuerdo a lo anterior, explica porqué somos personas religiosas..?
- Cuáles serian las consecuencias de NEGAR A DIOS...?
- Cuál sería tu opinión del fragmento resaltado con verde?
- Qué nos exige la conciencia cristiana...?
- De las cuatro imagenes escoge una de ellas y explicala...
- Menciona dos causas o hechos por las cuales nosotros hemos perdido la dimension religiosa...'
- Formula tres preguntas de la lectura de este blogs, y respondelas
NOTA: Esta actividad debe presentarse a MANO, con su hoja de
presentacion y de conclusion, bien organizado en una CARPETA
Cualquier inquietud
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@wiltorb
hola pelaos ya se vieron el bloc soy Juan Felipe
ResponderEliminarpor favor se mas brve
Eliminarel niño rata se refiere alos pelaos del colegio manuel faustino mijica de fundacion magdalena
Eliminarentendiste si bueno denada
Eliminarsi pero no se cules cuatro imagenes porque nada mas hay dos imagenes
ResponderEliminarese era fabio
ResponderEliminarno hay imagenes
ResponderEliminarla flojera de los profesores al formular preguntas ellos mismos los lleva a entrar a paginas como estas donde ya tienen las preguntas hechas. JAJAJJAJA y si, me refiero al faustino
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